Andrés Mompín se pone al frente como vocal de la pionera iniciativa aprobada por la FAP en su última asamblea con el objetivo de «cerrar el círculo» en la promoción de la disciplina.
La Federación Andaluza de Pádel (FAP) aprobaba el pasado fin de semana la creación del denominado proyecto ‘Pádel sin límites’, por el que se creaba ex profeso una vocalía de pádel adaptado. Con el visto bueno de la asamblea, el organismo presidido por Mª del Mar García-Lorca ha puesto en marcha un ambicioso programa con el que cubrir una deuda pendiente, promocionando así el pádel a todos los niveles al dirigirse en este caso a personas con distintas capacidades.
«El equipo que formamos la recién creada vocalía federativa de pádel adaptado y su proyecto ‘Pádel sin límites’ recoge con ilusión el encargo de la Federación Andaluza de implantar un programa de desarrollo del pádel adaptado para personas con discapacidad en la región«, comenta al respecto Andrés Mompín, máximo responsable de la recién creada vocalía, a la que llega tras hacer valer su experiencia como director técnico de la Asociación Pádel Integra.
«Como técnicos deportivos formados en la propia FAP y con la experiencia y capacitación que nos otorga el trabajo desarrollado durante cinco años en programas de atención para personas con capacidades diferentes, pensamos que estamos suficientemente preparados para desarrollar este proyecto federativo, pionero en su magnitud. Esto supone un gran reto para la entidad, pero debe de ser sobre todo una gran motivación para asumir el trabajo que supondrá«, añade Mompín.
Entre los objetivos marcados por este programa integral se encuentra la realización de cursos y escuelas de iniciación, un programa de voluntariado, formación para docentes FAP, torneos de pádel en silla o eventos de sensibilización para todo tipo de discapacidades.
La intención no es otra que «aportar soluciones participativas para el colectivo de personas con discapacidad que pretenda acercarse a nuestra Federación. Las dificultades que entraña implantar cualquier proyecto para el colectivo de personas con discapacidad son tradicionales, pero aún más si se necesita aunar criterios en terrenos aún por delimitar, en crecimiento y con problemas de sostenimiento económico», añade Mompín, ilusionado con este pionero reto.
«También es un propósito novedoso hacer fomento del pádel en ámbitos diferentes a los acostumbrados. Para ello pretendemos ofrecer un proyecto profesional, sólido y atractivo. Desde la modestia -concluye el vocal de pádel adaptado de la FAP-, nos encantará ser embajadores de este hermoso proyecto, pero sobre todo, ser portadores de una ilusión y que ésta sea al fin cerrar el círculo de este deporte con la inclusión de personas con distintas capacidades».