Una iniciativa que trabaja para garantizar el buen desarrollo de todos durante la competición
La Federación Andaluza de Pádel apuesta por “Todos podemos sumar”, un proyecto que nace de la preocupación del ente andaluz por el compromiso y las interrelaciones que surgen ente hijos y padres, motivadas por la connivencia en la práctica deportiva de sus hijos.
Desde la FAP consideramos que padres y madres forman parte del equipo integral y compacto en la etapa del menor, formada principalmente por: Deportista-Entrenador-Padres y Madres (Triángulo de Smoll, 1991), teniendo cada componente del equipo su rol determinado, tendentes a la armonía y evitando solaparse entre ellos. Para que la información que se transmite en este proyecto sea lo más próximo a la realidad, el estudio de la población que estamos llevando a cabo se ha enfocado en la evaluación de las actividades parentales, de los padres y madres de los deportistas que compiten en el circuito andaluz de menores, dividida en dos fases.
La primera de ellas consiste en una evaluación cualitativa donde se observan las conductas acción-reacción de los padres y madres durante el desarrollo de una prueba; la segunda de carácter cuantitativo recoge datos de padres, madres, entrenadores y menores sobre las actividades de estos últimos a través de la batería de instrumentos COPADE.
RELACIONES
Realizada esta primera fase de evaluación, con la recogida del banco de datos, análisis y finalización del informe correspondiente, obtenemos un plan director, que nos orienta y que en la segunda fase del proyecto se procede a exponer. Por parte del Psicólogo, Carlos Díaz Romero, se impartirán charlas de formación en las diferentes pruebas, orientadas y dirigidas en función de los resultados obtenidos y que aporten las medidas constructivas y correctoras aconsejables.
El punto y final al proyecto lo ponen dos tipos de talleres con el equipo integral. El primero de ellos orientado al colectivo de padres, madres y entrenadores, en el que se les informa a los entrenadores sobre lo trabajado con los padres para que puedan ponerlo en práctica en diferentes circunstancias, dando lugar al debate con un cierre de puntos comunes. El otro taller consiste en que todos los componentes formen parte en sí, presentando los puntos comunes encontrados en el cierre del anterior taller, haciéndoles ver a los menores de los cambios que se quieren inculcar en todos los componentes del equipo.
